La diabetes es una enfermedad con una importante repercusión sobre la piel, ya que el 30% de los pacientes diabéticos presentará manifestaciones cutáneas en algún momento de la vida, las cuales varían dependiendo de la edad de inicio de la diabetes y de la severidad de la enfermedad de base.
Según
el dermatólogo Modesto Martín González “es imprescindible que pacientes y
dermatólogos nos mantengamos al tanto de las manifestaciones cutáneas que van
surgiendo, para realizar un diagnóstico temprano y ayudar a prevenir las
secuelas”.
El
doctor, miembro del equipo de especialistas de la Clínica Dermatológica Dr. E.
Herrera, explica que los cambios cutáneos secundarios a la diabetes están
producidos por dos cuestiones fundamentales:
- Por los elevados niveles de glucemia, ya que la hiperglucemia crónica implica la generación de residuos químicos que producen efectos nocivos en diferentes tejidos del organismo, entre ellos, la piel.
- Y por las alteraciones que se producen en los vasos sanguíneos y en las terminaciones nerviosas.
Por
estos motivos, la piel de una persona diabética corre el riesgo de mostrar:
- a)
Sequedad de la piel, descamación y una reducción de la elasticidad de la
piel. Por lo que es necesario hidratarla todos los días y dedicar tiempo a su
cuidado.
- b)
Enrojecimiento facial, por la alteración de la microcirculación inducida por
hiperglucemia, un proceso que está directamente relacionado con la duración de
la enfermedad.
- c)
Limitación de la movilidad articular. El desarrollo de esta complicación
también depende del tiempo de duración de la diabetes y el apropiado control
de la misma. Los pacientes que presentan esta limitación de movilidad de las
articulaciones tienen un mayor riesgo de desarrollar otras complicaciones
microvasculares, principalmente retinopatía, nefropatía y neuropatía. Es
esencial controlar la diabetes con el especialista y seguir sus
recomendaciones.
- d)
Mayor susceptibilidad ante infecciones por hongos y bacterias. Las infecciones
por Cándida son relativamente más frecuentes en la población
diabética. Surgen en los pliegues
calientes y húmedos de la piel, por ejemplo debajo de los senos, alrededor de
las uñas, entre los dedos, en las comisuras de la boca, debajo del prepucio, en
las axilas y en la ingle.
En los pacientes con infecciones micóticas es importante realizar una monitorización estricta de las cifras de glucemia y de la hemoglobina glucosilada, debido a que si la diabetes no está estable, va a ser muy difícil controlar la infección. Para evitar su aparición, se recomienda secar completamente los pliegues del cuerpo para evitar la humedad.
Por otro lado, las infecciones bacterianas producen con frecuencia infecciones en la glándula del párpado como los orzuelos, foliculitis o infecciones de los folículos del pelo, forúnculos e infecciones alrededor de las uñas.
- e) Microangiopatía y neuropatía. Estas patologías afectan al pie del paciente, a sus vasos sanguíneos y terminaciones nerviosas, lo que a su vez pone en riesgo la capacidad de cicatrización, la movilidad y a la sensibilidad. Por lo general, las lesiones del ‘pie diabético’ aparecen en adultos, aunque se pueden observar en jóvenes. Las alteraciones estructurales y funcionales que van a predisponer al ‘pie diabético’ son la aparición de callosidades, uñas largas, ampollas y piel seca. En este caso, la identificación de estos factores predisponentes es primordial para llevar a cabo medidas de prevención, buscando reducir la incidencia de ‘pie diabético’ y la prevalencia de amputación de miembros inferiores en pacientes adultos diabéticos.
Así
pues, acabamos destacando cinco consejos muy importantes para el cuidado de los
pies:
- Realizar un examen anual de los pies por un profesional.
- Realizar inspección diaria de los pies.
- Secar muy bien los pies.
- No usar calzado apretado.
- Tratamiento de los callos, cortar las uñas de forma recta y eliminar las cutículas.
Y recuerda, si quieres saber algo más concreto o que abordemos algún otro tema dermatológico que te interese, puedes dejar aquí tu comentario o escribirnos y hacer tu consulta en clinicaeherrera@gmail.com
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